Resumiré algunos puntos, entre ellos el acertado diseño de escaparatismo en un espacio tan conflictivo como este, por fin una marca apuesta por trabajar toda la altura de este espacio comercial.
Una gran caja de cristal sin trasera encierra un enorme escaparate, que a través de unos paneles laterales que esconden guías desplazan plataformas en altura. Unas barras en el techo, son las encargadas de colgar decoración y cartelería. Unos rieles electrificados en la pared lateral, y en el perfil de la carpintería coincidente con las pilastras, iluminan todo el alto.
La primera zona de la tienda, es impecable, luego ya… Unas circulaciones demasiado estrechas, junto a un índice de ocupación del suelo muy elevado, contribuyen a una sensación de agobio bastante importante… Un gran acierto anular el escaparate de la calle Les planes, y colocar ahí la entrada de mercancía al almacén.
Para los que no conocéis la historia de este importante edificio, su fachada está parcialmente protegida, fue originariamente, un despacho textil. Posteriormente, sufrió varias modificaciones para adecuarse a ser la sede del Banco Exterior de España. Años más tarde, se demolió parte del edificio, manteniendo sólo una parte de él, para acabar siendo la flagship store de Adolfo Domínguez.
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